Cómo actuar ante el bullying
El acoso escolar es de las peores situaciones que puede vivir un niño o adolescente. Os contamos cómo protegerles y ante quién reclamar para tomar medidas.
Marina Barriendos | 11.05.2018
Uno de los debates más controvertidos en nuestro país es el de la legalización de la eutanasia. Parece que esta vez puede ser la definitiva ya que es la primera que se obtiene mayoría en el Congreso de los Diputados.
Esta iniciativa nació de la entidad “Dret a Morir Dignament” (“Derecho a morir dignamente”), de la que partió la proposición de ley que trasladó el Parlament de Catalunya al Congreso.
En general, si una persona coopere en el suicidio de otra que está gravemente enferma (por su deseo expreso), puede exponerse a una pena de 2 a 5 años de prisión. Además, si con esta cooperación se consigue el fallecimiento, el castigo se agrava a penas de entre 6 y 10 años de prisión. Actualmente, estas penas se reducen en los casos de eutanasia, de tal manera que el máximo al que se puede condenar a quién la realice es de 5 años de prisión.
El objetivo principal del proyecto presentado es precisamente la despenalización de la eutanasia, exonerando de responsabilidad a quien la practique.
En resumen, se trata de regular la práctica del suicidio asistido (la muerte segura, pacífica y sin dolor) de aquellas personas que deseen morir, por ser enfermas terminales o tener patologías incurables y permanentes que les provoquen un grave sufrimiento físico o psíquico.
De momento es sólo un proyecto y va a necesitar mucha regulación extra para poder definir protocolos: en qué situaciones y cómo se podrá aplicar, quién las aplicará y si los médicos o personas encargadas se podrán acoger a su objeción de conciencia.
Pese a ello, no cabe duda de que es un gran avance que el proyecto haya prosperado en esta primera fase.
Recordemos que ya hay países europeos en los que ya se practica, como Suiza, Holanda, Bélgica o Luxemburgo. En América, por ejemplo, también se lleva a cabo en Oregón y Colombia y, otro de los lugares en que es legal, es Canadá. En estos países el equipo médico administra fármacos a la persona que desea fallecer.
Por el momento quedaremos a la espera de los avances y de la redacción final, mientras seguiremos con la única opción que se nos permite que es la sedación terminal.
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