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Desde el punto de vista del consumidor, es fundamental conocer qué derechos nos asisten en esta época. Los 4 puntos que describimos a continuación pueden ahorrarnos más de un dolor de cabeza.

En qué debemos fijarnos al comprar en rebajas

La normativa que regula las ventas en rebajas, a nivel estatal, viene determinada por la Ley de Ordenación del Comercio Minorista. De todas formas, hay que tener presente la regulación propia de cada Comunidad Autónoma, puesto que las competencias en esta materia les están transferidas. La premisa de partida es muy sencilla: los derechos del consumidor son exactamente los mismos en período de rebajas que en cualquier otra época del año:

 

Los 4 puntos a tener en cuenta:

1. Métodos de pago y plazos de devolución

Esto implica, en primer lugar, que el comercio está obligado a aceptar los mismos medios de pago que acepta de forma habitual.

Asimismo, se ha de mantener la misma política de devolución del producto adquirido. Es muy importante que el consumidor se informe de cual es esta política, ya que, salvo que el producto adquirido esté deteriorado o presente algún defecto, el comercio no está obligado a la devolución del precio pagado. Esta información debe estar a disposición del cliente de forma visible. Por lo tanto, si el comercio publicita que durante un plazo de tiempo acepta cambios o devoluciones del producto, tiene la obligación de respetarlo también durante el período de rebajas. Es posible también que en algunos casos el establecimiento entregue al consumidor un vale canjeable durante un determinado período de tiempo. Es importante fijarse en este punto para que no se nos pase el período de validez. En todo caso, siempre hay que solicitar la factura o el tique de compra.

Hay que tener presente que, cuando se trate de compras online, el consumidor puede desistir de la compra en un plazo de 14 días naturales.

2. Garantía de los productos

En cuanto a la garantía de los productos adquiridos en rebajas, ha de ser las mismas que en cualquier otro momento. La adquisición de un producto rebajado no puede suponer pérdida alguna de derechos para el consumidor. Esto significa que, si el producto adquirido no se ajusta al contrato o presenta algún tipo de deterioro, el consumidor tendrá derecho, según proceda, a exigir la reparación, la sustitución, o en su caso, la rebaja del precio o la resolución del contrato.

3. Características de los artículos rebajados

Los productos rebajados han de formar parte anteriormente de la oferta habitual de venta del establecimiento. La ley prohíbe poner a la venta productos específicamente adquiridos para ser vendidos en época de rebajas o que presenten alguna tara. Por lo tanto, deben ser productos en perfectas condiciones. Además, para que pueda hablarse de rebajas, los artículos a precio rebajado han de suponer al menos la mitad de la oferta de venta habitual y han de estar claramente diferenciados de los productos que no estén rebajados.

4. Precio

Los comercios están obligados a mostrar, junto al precio rebajado, el precio original del producto, o bien indicar de forma clara el porcentaje de rebaja que se aplica.

En conclusión, es importante informarse antes de cuáles son las condiciones habituales de venta del establecimiento, comparar precios y no dejarse llevar por impulsos, teniendo claro que, comprando en rebajas, el consumidor va a tener las mismas garantía y derechos que siempre.