Ir al contenido Ir al buscador Ir a la página de contacto Ir al mapa web

Los regalos de boda que reciben los recién casados se deberían declarar, ya que se consideran donaciones y, por lo tanto, tributan en el Impuesto de Donaciones.

Cómo se regula

Este impuesto está cedido a las Comunidades Autónomas por lo que cada una de ellas puede regular reducciones, deducciones y bonificaciones.

La tarifa del impuesto, según una escala progresiva, va desde el 7,65 hasta el 34%, si bien, el porcentaje a pagar dependerá, además del importe del regalo, del grado de parentesco existente entre donante (persona que realiza la donación) y donatario (persona que recibe la donación) y de si se han recibido donaciones de la misma persona.


De no tributar por ellos, y en el caso de que se trate de grandes cantidades de dinero, Hacienda puede entender que son ganancias patrimoniales no justificadas y hacer que se integren en la base imponible general del Impuesto de la Renta.