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Margarita Perez | 15.10.2012
El descanso por maternidad puede verse afectado si el bebé nace prematuro y necesita hospitalización o si necesita hospitalización por otros motivos.
En el caso de nacimientos prematuros o aquellos en los que el bebé necesite hospitalización a continuación del parto, el periodo de suspensión por maternidad se puede empezar a contar a partir del alta hospitalaria, aunque se excluye del cómputo las seis semanas posteriores al parto, que es descanso obligatorio para la madre.
Si precisa hospitalización para más de 7 días, el permiso por maternidad se ampliará tantos días como el bebé se encuentre hospitalizado, hasta un máximo de 13 semanas adicionales.
A estos efectos, también se tienen en cuenta las hospitalizaciones iniciadas dentro de los 30 días naturales siguientes al parto
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