A raíz de la declaración del Estado de Alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19 (Coronavirus), se ha establecido una normativa con relación a la visita y celebraciones en los lugares de culto como las iglesias y templos.

Extremar las precauciones y mantener la distancia de seguridad

Acceso a los templos

Durante el estado de alarma, la norma establece que se podrá acceder siempre y cuando se eviten aglomeraciones y se pueda mantener la distancia de seguridad entre las personas para evitar contagios, que es de un metro como mínimo.

Misa en las iglesias

Algunos arzobispados han establecido que las celebraciones religiosas se suspendan presencialmente y solo se permite la celebración de misas a través de medios de comunicación telemáticos.

Bodas, bautizos y funerales

La celebración de bodas y bautizos programados antes de la aplicación del Estado de Alarma por Coronavirus, si no pueden suspenderse, se realizarán con el menor número de participantes posible y, en el caso de funerales, se propone su aplazamiento hasta que finalice el estado de alarma.

Otras reuniones religiosas

Las reuniones religiosas de comunidades como la musulmana, judía u ortodoxa, también se ven afectadas por esta situación y por tanto deben extremar las precauciones y cumplir con los preceptos de evitar aglomeraciones y mantener la distancia de seguridad.

Por lo tanto, aunque el Gobierno no ha ordenado el cierre de los templos, sí insta a evitar aglomeraciones y a extremar la distancia de seguridad mientras dure el estado de alarma por el coronavirus.